sábado, 26 de septiembre de 2015

La chica del tren - Paula Hawkins

Con más de treinta semanas consecutivas siendo el número 1 en ventas en América y Europa, era imposible no preguntarse cuál es el secreto de este éxito.
Pese a que no tiene una portada llamativa y mucho menos, una sinopsis que llame la atención, empecé a leer este espectacular best-sellers simplemente porque es muy difícil, por no decir imposible, alcanzar un ritmo en ventas de casi tres millones de libros en menos de un mes.

¿Su argumento?... muy simple. Rachel, depresiva, alcohólica, con un matrimonio desecho, descubre que la mujer que cada mañana observa, desde la comodidad de su asiento en el tren que coge a diario y que presupone tiene una vida feliz, ha desaparecido sin dejar rastro.

Contada a través de tres de sus protagonistas, la autora, nos descubre un sinfín de posibles culpables. Siendo, como en los grandes relatos, sólo hasta casi llegar al final, que conocemos al verdadero y como en los grandes relatos también, siendo el que menos lo imaginas. Además, un hecho muy curioso logrado por Hawkins, es que tampoco puedes confiarte de lo que leen tus ojos, porque la protagonista no siempre está lucida, por lo tanto, la duda constante de si lo que estás leyendo ocurrió en realidad, se mantiene desde el inicio hasta el final.

Me ha encantado el estilo de la autora, su impresionante volumen en ventas está plenamente justificado. La trama, tiene giros vertiginosos, que no te los esperas. Te mantiene en vilo constante, especialmente porque es capaz de hacerte sentir, la zozobra en la que está sumida la vida de la protagonista. Sientes en carne propia, los efectos nocivos que causa el alcohol en su ya inestable consciencia,  su baja autoestima, su cada vez más deterioro físico, su debilitado y humillado espíritu y su vulnerabilidad ante todos aquellos que se sienten con derecho de decidir lo mejor para ella.
Las otras dos protagonistas principales, al igual que Rachel, pero en distintas situaciones, son víctimas perfectas de hombres mentalmente inestables.
Me gustó muchísimo también los personajes secundarios, aportan dinamismo a la historia en su justa medida. El estilo de Hawkins, es fino y liso, sin complicaciones, haciéndote mucho más fácil y entretenida la lectura.

Muy, muy buen libro, más que justificado su arrollador éxito, no dejes de leerlo.


domingo, 6 de septiembre de 2015

Todas las canciones de amor que suenan en la radio (1, 2 y 3) - Cristina Prada




No recuerdo por qué empecé a leer el primer libro de la trilogía de Cristina Prada, supongo que por la misma razón que la mayoría, es decir, por el título bastante largo y llamativo que me atrajo mucho desde un principio. Lo cierto es que lo empecé y para ser honesta a la mitad del primero ya lo quería dejar. Es más, lo quise dejar hasta casi la mitad del tercer libro (y eso que cada libro contiene unas dos mil páginas electrónicas aproximadamente). 
Pero... y aquí va el gran pero... no lo hice, no pude. No podía hacerlo porque estaba totalmente enganchada. Y odio que me pase esto, porque es una dualidad que no sé cómo interpretar, ¿cómo interpretas que la trama sea la típica que abundan hoy día en las librerías, es decir: joven ingenua, enamorada automática y locamente de joven terriblemente apuesto, ultra-mega-súper millonario que le va el rollo BDSM, con grandes tendencias de machismo, controlador y absolutamente inteligente y aún así te enganche?, que los personajes sean totalmente inverosímiles y aún así te enganchen? que las situaciones sean lo más previsibles del mundo y aún así te enganches? que el estilo de escritura sea simple y llano y aún así te enganche? y que a pesar, de que no te guste para nada lo que estás leyendo y que incluso existan tantas escenas de sexo que termines odiándolo por un largo tiempo, aún así no puedas quedarte sin terminarlo?
No lo sé, definitivamente no lo sé... lo que sí sé, es que ha sido una sorpresa agradable y muy entretenida leer más de seis mil e-páginas, de una historia de amor cuyo final paradójicamente estaba cantado desde el principio.
Puntualizo que encontré fascinante y vale la pena recalcarlo, la excelente elección musical que la autora combina con cada situación. Cada canción, está perfectamente acoplada y refleja de una manera tácita las circunstancias que se describen. 
He descubiertos infinidad de autores desconocidos, hasta ahora por mí, que gracias a que he leído estos libros he podido escuchar y disfrutar de su voz y de sus letras. 
Otro punto positivo es la manera en que Cristina Prada termina cada uno de sus libros, narrando en primera persona el punto de vista masculino pese a que todo la historia está basada desde el punto de vista femenino.
Me disgustó de sobre manera, la poca profundidad de los personajes secundarios, creo que daban mucho más de sí, dejando a algunos incluso, sin un final definido.

La pregunta es ¿los recomiendo?... no hace falta, si los empiezas no pararás de leerlos.